7 de octubre de 2024
Limpieza y desinfección de instalaciones de ordeño
En las explotaciones ganaderas de producción de leche, la limpieza y desinfección de los equipos y circuitos de ordeño es fundamental para garantizar la salud de los animales, la calidad de la leche, la seguridad alimentaria de los consumidores y la eficiencia y rentabilidad de la explotación. Implementar y mantener rigurosos procedimientos de higiene de las instalaciones de ordeño no solo permite cumplir con las exigentes normativas higiénico-sanitarias de producción de leche, sino que también contribuye al éxito y sostenibilidad del negocio.
Tipos de residuos en instalaciones de ordeño
El conocimiento de las características de la suciedad acumulada en los equipos de ordeño es trascendental para poder entender los requisitos necesarios para diseñar unos adecuados protocolos de limpieza. En los equipos de ordeño se acumulan principalmente dos grandes tipos de suciedad:
- Residuos orgánicos: se componen principalmente de grasas, proteínas y azúcares procedentes de la leche. Es importante eliminar esta suciedad de las superficies lo más rápidamente posible después del ordeño porque con el tiempo se seca y endurece formando depósitos difíciles de eliminar.
- Residuos inorgánicos: se trata de minerales (generalmente calcio, magnesio y hierro) presentes en la leche o el agua, que precipitan en condiciones alcalinas o por el calor.
Como consecuencia de la acumulación de estos dos tipos de residuos, se desarrolla una película blanca y calcárea denominada piedra de la leche que proporciona superficies apropiadas para el crecimiento bacteriano. La piedra de leche, generada cuando la leche es calentada a temperaturas superiores a 60ºC y posteriormente refrigerada, está formada principalmente por depósitos de fosfatos de calcio/magnesio y proteínas.
La piedra de leche puede ocasionar problemas como la obstrucción de las tuberías de los circuitos, la disminución de la eficiencia de los equipos de ordeño y la proliferación de microorganismos. Por consiguiente, el diseño e implantación de adecuados procedimientos de limpieza y desinfección es imprescindible para minimizar los impactos negativos de la formación de la piedra de leche.
Productos de limpieza y desinfección
Para las operaciones de limpieza y desinfección de las instalaciones de ordeño se utilizan varios tipos de productos:
- Detergentes alcalinos: disuelven los depósitos de base orgánica (grasas, proteínas e hidratos de carbono de la leche). Además, ablandan y suspenden otros residuos, facilitando su eliminación mediante la acción mecánica proporcionada por la turbulencia de la recirculación.
Los productos alcalinos son sensibles a la dureza del agua utilizada en el proceso de limpieza, por lo que es necesario seleccionar un producto con la capacidad complejante adecuada y/o ajustar su dosificación a los niveles de dureza presentes. Su correcta dosificación ayudará a prevenir la formación de piedra de leche.
- Detergentes alcalino-clorados: son detergentes alcalinos que contienen cloro, que proporciona carácter desinfectante y mejora la eliminación de los residuos proteicos, permitiendo en una sola fase realizar la limpieza alcalina y la desinfección.
- Detergentes ácidos (desincrustantes): son detergentes a base de ácidos orgánicos, inorgánicos o una combinación de ambos. Su acción principal es eliminar los depósitos minerales acumulados y especialmente la piedra de leche.
Existen productos ácidos que incluyen componentes con propiedades desinfectantes, lo que permite realizar en una sola fase la limpieza ácida (desincrustación) y la desinfección.
- Desinfectantes: se usan después de una fase de lavado ácido o alcalino, con el objetivo de dejar la instalación con los niveles higiénicos adecuados para la siguiente operación de ordeño. También se pueden utilizar en instalaciones previamente lavadas, como fase individual previa al ordeño. Los productos desinfectantes mas utilizados están basados en ácido peracético, activo biocida de elevado rendimiento, que posee un amplio espectro desinfectante a bajas dosis.
Los productos de limpieza y desinfección deben utilizarse siguiendo las instrucciones del fabricante, ajustando, según las necesidades de cada instalación, la concentración de producto, la temperatura de la solución de limpieza y el tiempo de contacto entre la solución y la superficie a limpiar.
Equipos de limpieza cip
Las operaciones de limpieza deben realizarse según un procedimiento cuidadosamente elaborado para alcanzar el grado de limpieza requerido, asegurando que la secuencia sea exactamente la misma cada vez que se realiza.
Los sistemas de limpieza de equipos de ordeño in situ (CIP – “Cleaning In Place”) permiten que las soluciones de productos de limpieza y el agua de enjuague circulen a través de los circuitos y equipos sin necesidad de desmontar componentes de la instalación, permitiendo una total automatización del proceso de limpieza, con un correcto ajuste y control de la temperatura del agua, la dosificación de los productos de limpieza y los tiempos de circulación.
Además, la correcta regulación del caudal de la solución de limpieza, su velocidad de recirculación y la inyección de aire permiten conseguir un flujo turbulento que genera un efecto de fregado mecánico de la suciedad presente en las superficies internas de los equipos.
Procedimientos de limpieza y desinfección cip de instalaciones de ordeño
Un ciclo de limpieza CIP comprende varias etapas. La correcta combinación de las etapas de limpieza alcalina, limpieza ácida, desinfección y enjuagues permite obtener una óptima limpieza y desinfección de las instalaciones, asegurando sus óptimas condiciones higiénicas.
Pre-enjuague
Siempre debe realizarse inmediatamente después del ordeño, con el fin de evitar que los sólidos de la leche se sequen y se adhieran a las superficies internas del equipo, lo que dificultaría su eliminación.
Si se usa agua ligeramente caliente, los restos de grasa de la leche se eliminan más fácilmente. Realizar un enjuague con agua templada permite que los residuos de la leche se mantengan solubles, facilitando así su eliminación. Además, previene que la tubería se enfríe, evitando que en la siguiente fase de la limpieza ésta absorba el calor de la solución detergente.
El uso de agua demasiado caliente o demasiado fría puede provocar que la leche se adhiera a las superficies internas del equipo de ordeño:
- El agua demasiado caliente (> 55ºC) provoca la desnaturalización de las proteínas y que éstas formen una película adherente en las superficies.
- El agua demasiado fría (< 35ºC) provoca la solidificación de grasas y la formación de una capa grasienta en las superficies, dificultando su eliminación.
La fase inicial de enjuague debe durar el tiempo suficiente para asegurar que el agua de salida del sistema sea transparente, ya que la leche remanente aumentaría el consumo de producto detergente.
Un buen enjuague inicial puede eliminar más del 90% de los residuos de la leche.
Lavado alcalino / alcalino-clorado
Su propósito principal es eliminar suciedades orgánicas de origen graso y proteico, procedentes de la leche. Para garantizar resultados satisfactorios de la fase de limpieza alcalina, deben considerarse las siguientes 4 variables:
- Concentración de detergente: Un detergente debe reducir la tensión superficial de la solución de limpieza y ser capaz de dispersar la suciedad y las partículas en suspensión para evitar la floculación. La concentración de detergente debe ajustarse según el tipo de instalación, teniendo en cuenta que durante la fase de limpieza la solución se diluye con el agua de enjuague, con los residuos de leche y también se produce cierta neutralización. Por tanto, es necesario dosificar el detergente según las instrucciones del fabricante y comprobar que se mantiene suficiente concentración durante toda la fase de limpieza.
- La solución de lavado debe iniciar su circulación a una temperatura entre 60 y 80 ºC y es importante que esta no caiga por debajo de 40-45 ºC al final de la fase para asegurar la eficacia del proceso y evitar que los sólidos de la leche se vuelvan a depositar en las superficies.
- En los sistemas CIP, el efecto mecánico lo proporciona la recirculación de la solución de limpieza, que en combinación con aire, provoca un flujo turbulento. Las bombas del sistema CIP deben estar dimensionadas para obtener velocidades que permitan generar un flujo turbulento, asegurando que se cree un efecto mecánico que entre en contacto con todas las superficies de la tubería.
- Duración de la limpieza: debe calcularse cuidadosamente para obtener el efecto de limpieza óptimo. Normalmente, el ciclo de lavado debería durar entre 8-10 minutos según el tamaño y el tipo de instalación. El detergente debe circular el tiempo suficiente para disolver la suciedad, pero sin excedernos para evitar que el agua se enfríe demasiado.
“Es importante controlar y ajustar las variables del proceso de limpieza durante las diferentes estaciones del año (sobre todo verano e invierno) ya que la temperatura ambiental puede afectar las condiciones óptimas del proceso”
En prácticamente todos los sistemas de lavado utilizados actualmente, el programa de lavado consta solamente de 3 fases, unificando el lavado y la desinfección en una única etapa, gracias al uso de detergentes-desinfectantes alcalino-clorados.
Lavado ácido
En función de la dureza del agua y el número de ordeños diarios, se alterna un lavado ácido entre los lavados alcalinos. Habitualmente, con aguas duras, se hacen dos lavados alcalinos por cada lavado ácido y, con aguas blandas, se realizan de 1 a 3 lavados ácidos por semana.
Para garantizar resultados satisfactorios de la fase de limpieza ácida, deben considerarse también las 4 variables indicadas en la etapa de lavado alcalino.
Enjuague final
Después de la fase de lavado, las superficies se deben enjuagar con agua potable, durante el tiempo suficiente para eliminar todas las trazas de la solución de limpieza. Es fundamental realizar un buen aclarado final para garantizar que no queden residuos químicos que puedan contaminar la leche o que puedan atacar las superficies metálicas, dejando las instalaciones de ordeño debidamente preparadas para el siguiente uso.
Finalmente, todas las partes del sistema deben drenarse completamente después del enjuague.
Verificación de la limpieza
La verificación de la efectividad de todo el proceso debe considerarse una parte esencial de las operaciones de limpieza.
Una de las formas de verificación es mediante una inspección visual pero debido a que las líneas de proceso rara vez son accesibles a la inspección visual, ésta se sustituye por análisis microbiológicos centrados en varios puntos críticos de la línea, una vez finalizado el programa CIP.
Es necesario recordar que también es imprescindible realizar un correcto mantenimiento y una calibración del equipo de ordeño de manera regular.
Conclusiones
El diseño e implantación de protocolos de limpieza y desinfección de las instalaciones de ordeño es fundamental para garantizar la salud de las vacas, la calidad de la leche, la seguridad del consumidor y la rentabilidad de la explotación lechera.
Los sistemas CIP de limpieza y desinfección permiten garantizar la máxima estandarización de los procesos, proporcionando un gran ahorro de tiempo para los productores de leche, y contribuyendo así al éxito y la sostenibilidad del negocio.
PROQUIMIA, con más de 50 años de experiencia en el sector de la higiene, proporciona apoyo técnico para el diseño e implementación de los protocolos de limpieza y desinfección de instalaciones de ordeño, asesorando en el proceso de selección de los productos detergentes y desinfectantes más adecuados para cada instalación y proporcionando la formación del personal para su correcto uso.
La gama de productos PROQUIMIA para procesos de limpieza y desinfección de instalaciones de ordeño se compone de los siguientes productos:
Referencias
- Cleaning and sanitation of dairy equipment and containers [Internet]. Neologic Engineers. [citado el 10 de abril de 2024]. Disponible en:
https://www.neologicengineers.com/blogs/how-to-clean-dairy-equipment.php
- Cleaning and sanitizing milking equipment [Internet]. Thedairysite.com. [citado el 10 de abril de 2024]. Disponible en:
https://www.thedairysite.com/articles/686/cleaning-and-sanitizing-milking-equipment
- Cleaning of dairy equipment [Internet]. Dairy Processing Handbook. 2015 [citado el 3 de abril de 2024]. Disponible en:
https://dairyprocessinghandbook.tetrapak.com/chapter/cleaning-dairy-equipment
- Heguy J. How to properly clean milking equipment [Internet]. Ag Proud. 2011 [citado el 10 de abril de 2024]. Disponible en:
https://www.agproud.com/articles/20344-how-to-properly-clean-milking-equipment
- Limpieza y desinfección del equipo de ordeño. Identificación de problemas de limpieza (2a parte) [Internet]. Revistafrisona.com. [citado el 5 de abril de 2024]. Disponible en:
https://www.revistafrisona.com/Portals/0/articulos/n159/A15903.pdf?ver=V5xU5D3xbp_TF8JDxf4gbQ%3d%3d
- Limpieza y desinfección del equipo de ordeño. Identificación de problemas de limpieza (1ª parte) [Internet]. Revistafrisona.com. [citado el 5 de abril de 2024]. Disponible en:
https://www.revistafrisona.com/Portals/0/articulos/n158/A15802.pdf?ver=V5xU5D3xbp_TF8JDxf4gbQ%3d%3d
- Smith S. How to clean your milking equipment for low-risk raw milk — [Internet]. Raw Milk Institute. 2022 [citado el 3 de abril de 2024]. Disponible en:
https://www.rawmilkinstitute.org/updates/how-to-clean-raw-milk-equipment
¿Quieres más información?
Te ayudamos
De acuerdo con el Reglamento 2016/679 (RGPD) le facilitamos la información básica de protección de datos personales:
- Responsable del tratamiento: PROQUIMIA, S.A.
- Finalidad del tratamiento: Gestionar el envío de información, solución de consultas i/o recogida de datos para posibles relaciones comerciales.
- Legitimación: Consentimiento del interesado.
- Destinatarios: No se cederan datos a terceros, excepto obligación legal.
- Derechos: Acceso, rectificación, supresión, oposición, limitación, portabilidad y presentación de reclamaciones.
- Información adicional: Puede consultar la información adicional y detallada sobre Protección de datos en nuestra página web: Política de privacidad